Hola otra vez! =)
Tal día como hoy, un mes atrás, estábamos perdidos en un pueblo de Ávila, gente de Salamanca, Madrid, Mallorca y Málaga, despidiéndonos entre risas, abrazos y lágrimas (muchas lágrimas…) poniendo fin al campamento.
Pff parece que me he quedado clavada en esos diez días y que hasta que no los repita otra vez..., o algo parecido (una convivencia por lo menos =P) ..no voy a poder parar jajaja..
Es curioso…
Hay personas que no creen que Dios esté en todas partes, que sea omnipresente…
Yo creo que Dios está y nos tiene presente…siempre. En todo momento está con nosotros, solo que hay muchas veces que no sabemos apreciarlo. Está ahí cuando le necesitamos y cuando no, en el silencio, cuando estamos solos y cuando estamos en compañía, en los buenos momentos y en los más difíciles, aunque es en éstos, en los creemos que Dios está más lejos de nosotros.
Pero…y nosotros? Cuando tenemos presente a Dios?
Mayormente cuando tenemos problemas, cuando necesitamos ayuda con algo que es demasiado pesado para solucionarlo solos y, siempre, allí está Él.
¿Esto es interés?
¿Y todo lo que hacemos “bueno”? ¿Lo hacemos esperando conseguir algo a cambio?
Quizás, el reconocimiento de los demás, de alguien en concreto, de Dios, nuestro propio bienestar interior, de nuestra conciencia…el cielo? Demasiadas cosas…
A mí me encanta esta oración anónima, en la que habla de eso, de que hay que querer a Dios de una manera sencilla y desinteresada, igual que Él nos quiere a nosotros.
Un besitO**
No me mueve, mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido,
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.
Tú me mueves, Señor, muéveme el verte
clavado en una cruz y escarnecido,
muéveme ver tu cuerpo tan herido,
muévenme tus afrentas y tu muerte.
Muéveme, en fin, tu amor, y en tal manera,
que aunque no hubiera cielo, yo te amara,
y aunque no hubiera infierno, te temiera.
No me tienes que dar porque te quiera,
pues aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.
Tal día como hoy, un mes atrás, estábamos perdidos en un pueblo de Ávila, gente de Salamanca, Madrid, Mallorca y Málaga, despidiéndonos entre risas, abrazos y lágrimas (muchas lágrimas…) poniendo fin al campamento.
Pff parece que me he quedado clavada en esos diez días y que hasta que no los repita otra vez..., o algo parecido (una convivencia por lo menos =P) ..no voy a poder parar jajaja..
Es curioso…
Hay personas que no creen que Dios esté en todas partes, que sea omnipresente…
Yo creo que Dios está y nos tiene presente…siempre. En todo momento está con nosotros, solo que hay muchas veces que no sabemos apreciarlo. Está ahí cuando le necesitamos y cuando no, en el silencio, cuando estamos solos y cuando estamos en compañía, en los buenos momentos y en los más difíciles, aunque es en éstos, en los creemos que Dios está más lejos de nosotros.
Pero…y nosotros? Cuando tenemos presente a Dios?
Mayormente cuando tenemos problemas, cuando necesitamos ayuda con algo que es demasiado pesado para solucionarlo solos y, siempre, allí está Él.
¿Esto es interés?
¿Y todo lo que hacemos “bueno”? ¿Lo hacemos esperando conseguir algo a cambio?
Quizás, el reconocimiento de los demás, de alguien en concreto, de Dios, nuestro propio bienestar interior, de nuestra conciencia…el cielo? Demasiadas cosas…
A mí me encanta esta oración anónima, en la que habla de eso, de que hay que querer a Dios de una manera sencilla y desinteresada, igual que Él nos quiere a nosotros.
Un besitO**
No me mueve, mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido,
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.
Tú me mueves, Señor, muéveme el verte
clavado en una cruz y escarnecido,
muéveme ver tu cuerpo tan herido,
muévenme tus afrentas y tu muerte.
Muéveme, en fin, tu amor, y en tal manera,
que aunque no hubiera cielo, yo te amara,
y aunque no hubiera infierno, te temiera.
No me tienes que dar porque te quiera,
pues aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.
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